• A veces lo/a ves ansioso/a, pasándolo mal, muy perdido/a o poco conectado/a con el estudio, con una mirada de futuro, evitándolo…
• Quizás en lo vocacional tu hijo/a está sintiéndose inseguro/a, con muchas dudas incluso más allá de esta decisión, le cuesta ver sus habilidades, sus intereses, imaginarse a si mismo/a.

O al revés, te parece que no pone suficiente atención a este proceso, te preocupa que se equivoque y eso le afecte porque está “sobre simplificando” algunas conclusiones: “soy bueno para las matemáticas, así es que Ingeniería”, “Me carga lenguaje, así es que carreras que no tengan nada de eso…”, “Esta carrera porque es buena”, “No destaco en nada especialmente así es que no hay una carrera para mí”, “Me gustan demasiadas cosas así es que no sé”

Podrías ser que tu hijo/a tenga una amplia diversidad de intereses y habilidades y si bien esto es una tremenda ventaja en muchos sentidos, ahora que está en proceso de decidir qué estudiar, representa un desafío mayor para elegir.

Quieres que sea feliz, que se sienta motivado/a con lo que hace, que le vaya bien en el estudio, que pueda desplegarse en sus intereses, habilidades, características de personalidad…

También te interesa que tenga una buena vida, creando y/o sumándose a trabajos que le hagan sentido y a la vez le permitan tener una vida estable, cómoda, que lo/a haga sentirse importante, valorado y aportando a otros/as.

Te pasa que buscas, por ejemplo en Internet y está saturado de información, muchas veces con ideas demasiado generales, que ya conoces, poco realistas o poco prácticas. Hay más publicidad de carreras y universidades que espacios reales de apoyo al proceso de orientación.

Quizás has pensado en pedir que desde el colegio hagan más por el proceso vocacional de los estudiantes o has pensado en que quizás podrían contar con apoyo profesional para tu hijo/a, pero no tienes claro con qué profesional y cómo.

Quizás tu hijo/a ya entró a estudiar una carrera y no fue lo que esperaba. Esto le ha afectado en cómo se mira a sí mismo/a y tiene miedo de volver a equivocarse, lo cual está haciendo el proceso aún más difícil.

Tu hijo/a tiene suficientes actividades, entonces buscas algo profundo, a la vez que práctico y acotado en el tiempo, no un proceso terapéutico que no sabes necesariamente cuánto va a durar y a dónde va.

Te llama la atención la posibilidad de que no estudie al salir de 4º medio y que se tome el año para decidir, pero te preocupa cuánto aprovechará realmente el tiempo para ese objetivo y la forma de acompañarlo/a para que lo logre en ese período.

Te invito a que juntos/as vean mi charla “Los desafíos de decidir qué carrera estudiar”. Está dirigida a los/as adolescentes, sin duda les hará sentido y abrirá conversaciones.

Tu hijo/a puede tener un proceso de mirarse a sí mismo y luego explorar sus opciones con una mirada amplia y que considere distintos criterios importantes. Puede decidir tranquilo/a, feliz y en sólo 2 meses con mi programa Mírate, Explora y Decide.

Te invito a que juntos/as vean mi charla “Cómo mejorar las notas y aprendizajes”. Está dirigida a los/as adolescentes, sin duda les hará sentido y abrirá conversaciones.

Tu hijo/a puede trabajar su motivación, habilidades de estudio y aprendizajes. El resultado es producto de las estrategias de estudio y estas son entrenables. Es tan importante sentirse satisfecho/a con el proceso de aprender y con uno/a mismo/a.